Casi siempre que salgo de paseo la gente se para a mirarme, supongo que por mi porte y mis andares. Pero a veces sucede que además me señalan y me dicen cosas como "Mira, una ardilla" o "Es una comadreja?" o peor aún "Una rata!".
No creo que a ningún humano le gustase que yo me parara y gritara "Mira, un orangutan calvo!", así que para evitar malentendidos posteriores y que puedan admirar mi inigualable belleza sin quedar en evidencia les daré cuatro nociones para que puedan distinguir a algunos animales clave.
1. No soy una comadreja: las comadrejas son generalmente más pequeñas, tienen el pelaje distinto y si se fijan yo soy de color sable, o sea oscurita y con antifaz. No veran nunca una comadreja de este color.
2. No soy una nutria: Las nutrias son más orondas, la cola es sensiblemente distinta y suelen estar cerca del agua, por aquello de que les gusta nadar. No me veran nunca tan gorda ni tanto rato en el agua.
3. No soy una ardilla: La diferencia creo que es obvia, solo tienen que mirar el dibujo. No me veran nunca comiendo frutos secos ni subida en un árbol.
4. No soy una rata: Se que aquí hay polémica, pero creo que la clave está en el tamaño, la forma, el color y el pelaje. Fijense antes de anunciar a los cuatro vientos que han visto una rata con correa (a riesgo de quedar en ridículo ante los que si que saben lo que es una rata).
sábado, junio 17, 2006
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1 comentario:
tienes muxisima razon molesta k siempre esten ablando asi de nosotros una cosita k me a dixo mi papi lo de la foto no es una nutria, sino un coipu oye k no te moleste, ¡bueno saludos
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